Costilla de todos

Que no os mientan;
Adán y Eva
compartieron la pequeña costilla
no de ellos
sino de un cerdo merecedor
afán de la verdad.

Fue clavado a trozos
por cientos
de lanzas
repartidas
entre tierras
para conquistar
y arrebatar
por hambre
la piel de otros.

Esa costilla nunca fue nuestra;
pero egoístas, 
ególatras
y mentirosos nosotros,
siempre diremos
que compartimos
hasta nuestro
falso comienzo.




Comentarios

Entradas populares de este blog

Tormentosa vida

Forjado a males

Ceguera mentirosa