Taburete bohemio

Hoy la poesía
a su antojo se cobija,
bañada en aspirinas
y apnea inquieta,
en la colina
del abrazo 
de Dríade.

Arroja su Opus,
épica y delirante,
tallando
con su Crespo pincel
unas nubes
de arte ilesa,
rumiantes
por el omaso
de un tramo
nuevo y estéril.

Para dedicarle
al viejo sastre
un trapo
que limpie
el taburete
desdeñado
de la nostalgia.

Para dedicarle
un minuto
al amor.

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